viernes, 12 de abril de 2013

Labranza


Labranza, o cultivación, es la preparación agrícola del suelo por arado, rasgándolo, o dando vuelta.

Propósitos de la labranza

El arado afloja y airea el suelo que alternadamente facilita una penetración más profunda de raíces. Ayuda en el crecimiento de microorganismos y los gusanos presentes en el suelo y así, mantienen la fertilidad del suelo. Ayuda en mezclarse de la materia orgánica (humus) y de alimentos uniformemente a través del suelo
Por lo general, la labranza es definida según el tipo de actividad que se lleva a cabo:
Inversión: este tipo de labranza da vuelta al suelo en la parte en que es trabajado. Las capas superficiales son completamente enterradas y las capas más profundas son llevadas a la superficie. El argumento de que la labranza controla las malezas no es válido cuando se hace todos los años, ya que la misma cantidad de semillas es llevada a la superficie.
Mezcla: esta operación mezcla todos los materiales en forma homogénea hasta una cierta profundidad, por lo general cerca de 10 cm.
Rotura: este tipo de labranza abre el suelo de modo de aflojarlo sin mover los terrones, por ejemplo en operaciones de decompactación del suelo (subsolado).
Pulverización: esta operación consiste en romper finamente los terrones de suelo de modo de formar un horizonte muy fino, por ejemplo, la cama de semillas. Se ejecuta en unos pocos centímetros debajo de la superficie.
La inversión y la mezcla agresiva afectan la cantidad de residuos que quedan sobre la superficie del suelo. Los arados de vertedera y de discos dan vuelta completamente el suelo mientras que los arados de cincel rompen y mezclan el suelo y los cultivadores solo lo mezclan. Las rastras pulverizan el suelo de modo de preparar la cama de semillas.

Se pueden distinguir por lo menos cuatro tipos de operaciones de labranza en los sistemas convencionales:
Labranza primaria
Labranza secundaria
Actividades de manejo de los cultivos como control de malezas, surqueo, rotura de costras, etc.
Pero en algunos casos la labranza profunda o subsolado es necesaria para romper las capas compactadas en los perfiles profundos.

En áreas tropicales y subtropicales, donde el peligro de la erosión causada por las lluvias es alto, los suelos son, por lo general, pobres y erosionados y las temperaturas son altas por lo que la descomposición es rápida; en estas condiciones los sistemas de labranza son usualmente seleccionados con el objetivo de crear una cama de semillas muy fina. Al estar dirigidos solamente a este objetivo los sistemas de labranza están asociados a ciertos procesos de degradación.
El tipo y el número de operaciones de preparación de la tierra determinan la cantidad de los residuos que quedan sobre la superficie del suelo. Por ejemplo, la arada deja menos del 15 por ciento y un cultivador deja entre 50 y 70 por ciento de los residuos intactos sobre la superficie del suelo.

Sistemas de la labranza

Labranza intensiva

Labranza reducida

Labranza de la conservación

La labranza de conservación, es un sistema de laboreo que realiza la siembra sobre una superficie del suelo cubierta con residuos del cultivo anterior, con lo cual se conserva la humedad y se reduce la pérdida de suelo causada por la lluvia y el viento en suelos agrícolas con riesgo de erosión. Con ésta práctica se incrementa l a capacidad productiva del suelo, se aumentan los rendimientos y se reducen los costos de producción.

Este sistema mantiene por lo menos un 30% de la superficie del suelo cubierta con residuos de cultivos después de la siembra.

Labranza en camellones.
El suelo se laborea hasta poco antes de la siembra; utilizando escardillos o removedores de residuos, se laborea aproximadamente un tercio de la superficie del terreno en el momento de la siembra. La siembra se hace en bordes o camellones de una altura entre 10 y 15 cm. El control de malezas se realiza con una combinación de escardas y herbicidas; las labores de cultivo se utilizan para reconstruir los bordes

Labranza en franjas.
El suelo se deja sin laborear hasta antes de la siembra. Al momento de sembrar se laborean franjas aisladas del suelo, aproximadamente de un tercio de la superficie del terreno, con arado rotatorio, un cincel en el surco de siembra o un escardillo. El control de malezas se realiza mediante herbicidas y escardas

Labranza de cobertera.
En esta modalidad se laborea la superficie total del suelo antes de la siembra. Se utilizan cinceles con puntas en V del tipo de pata de ganso (cincel de asadas). El control de malezas se realiza mediante una combinación de herbicidas y escardas.

Labranza cero o no-labranza.
No se disturba o laborea el suelo hasta antes de la siembra. L a siembra se real iza con implementos que cortan los residuos de cosecha y depositan la semilla en una proporción del terreno no mayor de 7 cm de ancho. El control de malezas se realiza con aplicaciones de herbicidas.

Las decisiones sobre el tipo de labranza a utilizar en un suelo, dependen de los implementos con que cuente el agricultor, desde la pala, azadón, coas, sembradoras de tiro animal, hasta sembradoras de precisión, así como de las condiciones climáticas y de la presencia de malezas, plagas y enfermedades.

Ventajas de la labranza de conservación

Conserva la humedad y reduce la erosión del suelo.
Reduce los costos de producción.
Incrementa la productividad del suelo.
Ahorra energía, tiempo y mano de obra.
Reduce la compactación del suelo.
Mejora la estructura del suelo y la agregación de las partículas.
Genera mayor actividad biológica en la superficie del suelo.
Reduce la infestación de malezas.
Mejora el desarrollo de las raíces de los cultivos.
Mejora el drenaje interno del suelo.
Reduce las deficiencias hídricas.


ARADOS
Los arados de discos pueden ser: de arrastre, semisuspendidos, suspendidos.
De arrastre: los arados de discos de arrastre pueden ser de dos tipos: normales y mixtos.
De arrastre normal: como su nombre lo indica, estos arados van arrastrados por el tractor. Estos arados llevan tres ruedas: dos que van por el surco y una que va por el barbecho. Además, se añaden pesos a las ruedas cuando se ara en terrenos duros para aumentar la estabilidad del arado.

De arrastre mixto: este tipo de arado es una combinación de un arado normal de discos y una grada de discos. Estos arados llevan el mismo bastidor, disposición de ruedas y mecanismos de regulación que los arados normales, pero se distinguen de éstos porque todos los discos van montados sobre un único eje y giran al unísono, como sucede en las gradas de discos.
Semisuspendidos: la parte delantera de éste va conectada y montada sobre el tractor, haciendo innecesarias las ruedas de barbecho y la delantera del surco. La rueda trasera se controla con por el mecanismo de dirección del tractor. Son muy compactos y de manejo sencillo por lo que puede tomar con facilidad las curvas y alcanzar cualquier rincón. Se levantan moviendo una palanca que esta en la parte delantera del arado.
Suspendidos: se conectan al tractor con mecanismos de enganche de uno, dos o tres puntos. Se montan atrás y tiene una rueda trasera para absorber el esfuerzo lateral, algunos se montan atrás de las ruedas traseras.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario